«Tenemos que encontrar un equilibrio entre las emociones y la tecnología.»
“Los mercados son conversaciones” es el primero de los puntos del “Clue Train Manifesto” escrito en 1999 con objeto de explicar cómo Internet estaba cambiando algo tan básico y humano como son los mercados.
En ese mismo manifiesto también se decía que:
– Internet permite conversaciones entre seres humanos que simplemente no habían sido posibles en eras anteriores. En especial en la época de los medios de comunicación masivos.
– Los hiperenlaces subvierten la jerarquía.
La educación también es una conversación, y como los mercados también se ve afectada por la tecnología.
Hemos vivido una época de “informatización” de la educación, en la que únicamente hemos tecnificado las conversaciones que antes tenían lugar en el aula o en la relación cara a cara. Esta “informatización” no ha producido el resultado deseado de mejora y enriquecimiento, sino que ha deshumanizado esas conversaciones. En el “Clue Train Manifesto” también se avisaba de que:
– Ya sea transmitiendo información, opiniones, perspectivas, argumentos en contra o notas humorosas, la voz humana es abierta, natural, sincera.
Y la “informatización” de la educación se ha olvidado de la parte más humana de ese proceso. Hemos enlatado profesores y contenidos dejando fuera las emociones.
Pero eso no significa que la tecnología no tenga que ser un elemento clave de la educación. Al contrario la tecnología nos permite abordar la educación eliminando muchas barreras:
– Las físicas (hoy los alumnos de una clase pueden estar en 5 continentes).
– Las de cantidad (hoy podemos tener conversaciones entre miles de personas a la vez, como sucede en las redes sociales).
– De memoria (hoy tenemos nuestro cerebro conectado con el mayor repositorio de datos de la historia).
– De proceso (hoy hay procesos de colaboración que no eran posibles antes).
El desafío es ser capaz de entender que el cambio profundo que la tecnología está teniendo en nuestra sociedad (empezando por los mercados), está ahora empujando el cambio en la educación. Nuestro desafío es que tenemos que encontrar un equilibrio entre las emociones y la tecnología.
Al fin y al cabo no hay aprendizaje sin emoción, y quizás haya que cambiar no solo como aprendemos si no también el qué.
Es muy difícil anticipar el futuro, pero lo que sí parece evidente es que no sabemos cuál será el formato de la conversación, pero la educación será siempre una conversación entre personas.
Agustín Cuenca: fundador y Director General de ASPgems, una empresa especializada en el desarrollo de soluciones ágiles y fabricante de productos SaaS enfocados a PYMEs y autónomos como Facturagem. Creador y fundador de NeuroK, plataforma de formación online, centrada en en los principios de la neuroeducación.
Aquí puedes leer las 101 propuestas y otros artículos como este. Este artículo forma parte de la reflexión conjunta del proceso Calmar la Educación. Seguiremos publicando otras opiniones de personas relevantes del mundo educativo. Queremos generar un espacio de debate plural y abierto a todas las personas interesadas en la transformación educativa.
